EL BEMA DEL TRIBUNAL DE CRISTO

SI ESTARÁS EN EL TRIBUNAL DE CRISTO

Ya estás en Cristo y al estarlo estás sellado con el Espíritu Santo, salvo por gracia, predestinado, justificado, santificado y glorificado, y esta Fe en Cristo te libera del juicio del gran trono blanco de Apocalipsis 20:11-15, pero irás al tribunal de Cristo.

2 Corintios 5:10: “Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo…”

Romanos 14:10-12: Cada uno dará cuenta de sí mismo a Dios.

1 Corintios 3:12-15: Las obras serán probadas por fuego; si permanecen, habrá recompensa; si se queman, pérdida.

La palabra -Tribunal- tiene dos connotaciones en el griego: (1) Criterion: "el instrumento o medio para probar o juzgar cualquier cosa; la regla por la cual uno juzga" o "el lugar donde se hace un juicio; el tribunal de un juez; un banco de jueces". Vemos -Criterion- en 1 Corintios 6:5 “No hay entre vosotros un sabio, ni aun uno que pueda juzgar o (hacer Criterion) entre sus hermanos”.

(2) Bema: “lugar elevado (Tarima) (Pódium) (Palestra) a donde se sube con escalones. Es una tribuna usada como asiento oficial de un juez". Un lugar en donde se sentaba el juez de la arena y desde donde recompensaba a los oponentes, emitía el juicio entre conquista y pérdida. La palabra -Bema- se usaba en el sentido judicial.

Pablo utilizó -Bema- para comparecer ante Cristo, porque el -tribunal- no es una silla es -Cristo mismo. Ante Cristo estaremos todos los que tenemos el Espíritu de Cristo. ¿Qué se juzgará de nosotros? Romanos 14:10 Pero tú, ¿Por qué juzgas a tu hermano? O tú también, ¿Por qué menosprecias a tu hermano? Porque TODOS compareceremos ante el tribunal de Cristo. No es un juicio para condenación, porque en Romanos 8:1 No hay ninguna condenación para el que está en Cristo.

Cristo es redentor, es abogado y ahora es juez. Ante él se evaluará tu fidelidad, el servicio en el Reino, tu ministerio, tu carácter, tu calidad con que hiciste las cosas, tus intenciones, tus motivaciones, tus aportes o siembras y frutos que hiciste mientras estabas en tu cuerpo sea bueno o se malo, que son dos términos que no tiene que ver con -moralidad- sino con bueno (lo que merece recompensa) y lo malo (lo que merece perdida). Lo bueno es lo útil y lo malo lo inútil. Lo bueno es lo honroso y lo malo lo deshonroso. Cristo te dará tu merecido. No será un castigo será una exaltación o una reprobación de acciones o de obras. El Bema es una rendición de cuentas.

Pablo utilizó la metáfora de la vida espiritual como una carrera, en la cual hay lugar para los triunfadores y la satisfacción a todos los que llegan. El Bema será un reconocimiento a los servidores fieles en la obra del Reino. Estaremos en el encuentro personal con Cristo.

Cuida tus maneras de juzgar a un hermano en Cristo, ¿Por qué juzgas a tu hermano? (Romanos 14:9) lo menosprecias, por esto si haces de esto un -hábito- sin cambio, estarás de -rodillas- ante Cristo (El tribunal). Cada uno de nosotros dará a Dios cuenta de sí. No nos juzguemos más. No pongamos más tropiezos ni ocasiones de hacer caer al hermano. Sigamos a lo que contribuye a la Paz y a la mutua edificación.

Cuando hagas banquete, llama a los pobres, mancos, cojos, ciegos y serás bienaventurado y te será recompensado en la resurrección de los justos (Lucas 14:13,14).

Todos "compareceremos" que significa “Ser puesto de manifiesto” que indica -sacar a la luz lo que había permanecido oculto hasta ese momento-. No será un manifiesto ante un público, sino privado ante Cristo solamente porque es -cada uno según Sus obras-.

Serán las obras efectuadas mientras cada uno estuvo en el cuerpo. La obra aquí es del griego “Phaulos” que se refiere a lo que es malo por su inutilidad, a lo que es imposible de obtener de ello una ganancia. Es como cuando nos referimos a que un negocio es malo, no porque sea perverso o reprobable (moralmente), sino porque no produce ningún provecho o ganancia.

Recordemos la parábola de las diez minas, el siervo fue malo (no por aspecto moral) sino porque no produjo ninguna ganancia para su amo. Es en este sentido será el examen ante el tribunal de Cristo.

Todas nuestras acciones, desde que aceptamos a Cristo, se espera que produzcan un fruto, de no ser así son inútiles.

Si un mensaje de un predicador no fue hecho para producir fruto en los oyentes, sino fue hecho para la gloria de Cristo, el deseo de corrección, de confesión de pecado, de acercamiento a Dios, no importa cuánto esfuerzo hubiera requerido el predicador, le será calificado como inútil y en vano.

¿Qué fruto para Cristo produce tu asistencia a las reuniones del Reino? ¿Ninguno? Fuiste solo para ocupar un puesto y aumentar la numerolatría, entonces no te sirve de nada ante Cristo, todo fue hojarasca, heno, madera.

No importa cuánto te esfuerces para guardar un testimonio, si no es para la gloria de Cristo todo eso se quemará en el tribunal de Cristo. Dices: yo no hago nada en el reino, porque otros ya lo hacen, te será tu negligencia, apatía calificada como inútil. Dios nos colocó en Su Reino después de salvarnos para que produzcamos fruto.

No porque se hable de obras, son estas las que dan mérito para estar en este lugar, el mérito es el sacrificio de Cristo en la cruz del Calvario.

1 Corintios 3:14-15 “Si permaneciere la obra de alguno que sobreedificó, recibirá recompensa. Si la obra de alguno se quemare, él sufrirá pérdida, si bien él mismo será salvo, aunque, así como por fuego”. Es claro que el resultado es una recompensa o la pérdida de la misma. Este examen no es un juicio externo sino interno, en el ámbito de las intenciones y motivaciones ya que tiene que ser pasado por fuego para sacarlo a la luz.

El Señor que habita en nuestro corazón conoce nuestra intensión, a su mirada todo queda descubierto. Nosotros mismos veremos cosas que considerábamos los más ocultos secretos y estarán ahí, desnudos, a la vista.

La palabra "pérdida" es del griego “Zemioo” no implica la idea de sufrimiento físico, emocional o mental. Su idea básica es -pérdida- en el sentido de perder el premio que pudiera haber recibido. Dice 2 Juan 8 Mirad por vosotros mismos, para que no perdáis el fruto de vuestro trabajo, sino que recibáis galardón completo. Nos enseña la posibilidad de la pérdida por falta de fidelidad.

Cuando algo es calificado como “Adokimos” (griego) es porque era inútil, aparente, desaprobado o falso, pero cuando algo es buena obra, buena intención y clara motivación es calificado como “Dokimos”.

Nadie en el Bema de Cristo será eliminado. Somos salvos para ser útiles, pero se espera de nosotros no ser hallados inútiles porque todo lo -inútil- en el Bema de Cristo sufriría la pérdida.

Hebreos 13:20 “Os haga aptos en toda obra buena para que hagáis su voluntad, haciendo él en vosotros lo que es agradable delante de él por Jesucristo; al cual sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén”. Lo que no le agrada al Señor, todo fuera de esto es heno, hojarasca, madera, buen material para quemar o sufrir desvaloración y pérdida.

Las recompensas son coronas: en 1 Corintios 9:25 la corona corruptible. En 1 Tesalonicenses 2:19 la corona del gozo. En Santiago 1:12 la corona de vida. En 2 Timoteo 4:8 la corona de justicia. En 1 Pedro 5:4 la corona de gloria. Corona es del griego “Stephanos” que es “Exaltación”. En Apocalipsis 4:10 los 24 ancianos postrados a los pies del Cordero echaron Sus coronas delante del trono de Cristo. El Bema no es un juicio punitivo es un examen verificativo.

*Este documento pertenece a Somos Reino Internacional del Ministerio Mentor Dr. Rey Estrada. Escritor. Teólogo. Mentor del Reino. psicólogo. Puede usarse si copia y pega sin alterar el contenido ni quitar ni agregar. El Autor es el único responsable de presentar defensa de su escrito.  Derecho Reservado.

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