EN PLENITUD LA POSICIÓN GENERA LA POSESIÓN

A quien anunciamos, amonestando a todo hombre, y enseñando a todo hombre en toda sabiduría, a fin de presentar Perfecto en Cristo Jesús a todo hombre”  Colosenses 1:28

Una cosa es posición y otra es posesión. En posición eres guardián, pero en posesión eres administrador, Pablo escribió en Gálatas 4:1 que mientras el heredero es niño, en nada difiere del esclavo, aunque es señor de todo. Un niño rico está en posición, pero mientras sea niño no es señor de todo, es decir, no es un poseedor pragmático. En posición tienes el título de heredero, pero en posesión tienes la riqueza plena. Niño es proceso. Señor es madurez.

La posesión es un señorío físico o de hecho que se ejerce sobre una cosa, y que se diferencia de la mera tenencia de la posición que se tiene. Una posesión es una realidad de dominio propio.  En la tenencia de la posición se tiene conciencia de que uno va a hacer dueño o propietario de algo.

En posición uno no es propietario de la posesión absoluta. En posición sólo tiene las arras o la cuota inicial, leemos en Efesios 1:13,14 que, habiendo oído el evangelio de la salvación por gracia, habían sido sellados con el Espíritu Santo de la promesa, que eran las arras de su herencia hasta la redención de la posesión adquirida para alabanza de su gloria. Redención adquirida referida a la gloria de lo mortal a lo inmortal.

Todos ellos quedaron en posición de la posesión adquirida. En posición tuvieron el anticipo, arras, cuota inicial y la garantía que serían herederos de la redención de la posesión que iban a adquirir. En posición los efesianos tuvieron el sello del Espíritu Santo que les garantizaba que Dios les cumpliría la herencia total en plenitud.

El propósito de una posición espiritual es llevar al sujeto a la posesión. Cuando corría el año 67 d.C. de la carta se le reveló al autor de hebreos en Hebreos 9:12 que Cristo ya había entrado una vez y para siempre en el Lugar Santísimo, que en el V:24 llama “el cielo mismo”, y habiendo presentado por tofos los creyentes del I Siglo, obtuvo para ellos eterna redención.

En (arras) de la redención estuvieron en (posición) pero en el cumplimiento de la eterna redención ya era propietarios totales en plenitud tal como lo fueron en el año 67 d.C. de la carta. No influimos desde la posición sino desde la posesión de una cosa.

La posición nos indica que tenemos la cuota garantizada; pero la posesión asegura que todas las cuotas ya fueron concluidas y ahora nos encontramos en la plenitud de la posesión adquirida.

En Lucas 24:49 vemos una posición, el Cristo resucitado les dijo a sus discípulos que se fueran a Jerusalén a esperar la promesa del Padre sobre sus vidas, hasta que fueran revestidos de poder desde lo alto, Hechos 2 dice que todos estaban unánimes juntos en el día de pentecostés, el poder de lo alto llenó toda la cada sonde estaba sentados (Esto es posición) y ¿Cuándo vino la posesión de la promesa? Cuando todos fueron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a ser testigos ante el público de judíos piadosos que habían venido de todas las naciones de aquella época a la gran fiesta de pentecostés. La expresión ser llenado es del griego “Pleroemicro” que significa “Plenitud” que viene de Pleroo que es “Completo”, ¿Qué nos enseña esto? Que mientras se está en posición no se es propietario de la plenitud de una cosa. Si tú estás en posición de esperar que algo o alguien llegue del futuro, no puedes afirmar ni conviccionar que tienes esa posesión que esperas.

En Hebreos 10:9 encontramos que lo primero es una posición y lo último es una posesión. Todos los sacrificios de animales fueron la sombra o la posición hacia los bienes venideros, pero estando ya presente Cristo sumo sacerdote de los bienes venideros. Si está presente no es posición es posesión. Cristo vino y quito lo primero, para establecer su magno sacrificio que hizo perfectos para siempre a los que esa sangre mácula santificó en el primer siglo, Hebreos 10:12,14, ¿Qué significó esto? Que en Cristo es dónde se encuentran todas las posesiones del propietario espiritual.

El deseo de Dios es que tu entendimiento pase de la posición espiritual a la posesión para ser propietario. Una posición es un anhelo, pero una posesión es el mejor de los momentos y estados porque se es propietario de todo. Una posición representa todos los estados primitivos del espíritu; pero una posesión es el disfrute pleno de todas las posiciones en Cristo “Y en él estamos completos” (Colosenses 2.10). Completo no pertenece a posición sino a posesión.

El autor de hebreos en Hebreos 6:1 dijo “Dejando ya los rudimentos de la doctrina de Cristo, vamos adelante a la perfección. En rudimentos el individuo está en posición más no en posesión porque el niño en Cristo no ha llegado a la perfección o hacia la madurez espiritual o plena, por eso, Pablo decía en 1 Corintios 2:6 “hablamos sabiduría entre los que han alcanzado madurez”, los rudimentos son para los niños o infantiles de entendimiento, y a estos niños los encontramos todos en posición dentro del iglesismo más no en posesión dentro del Reino. Pablo explicó en 1 Corintios 13:11 que los niños hablan, piensan, juzgan como niños. Los niños en Cristo son del prejardín escolar de Cristo. Los niños hablan posición no posesiones porque no son señores.

Pablo dejó bien claro que se puede pasar de la posición a la posesión, cuando dijo “más cuando ya fui hombre, dejé lo que era de niño”. Los hombres en Cristo somos los entendidos, los maduros, los propietarios, los que hemos dejado las “niñerías y el infantilismo” doctrinal escatológico y hemos dejado la leche y los rudimentos de las profecías y hemos entrado en plenitud a poseer todas las posiciones espirituales en Cristo. Estamos sentados juntamente con Cristo.

En la posición hay vacilación, pero en la posesión hay firmeza y todo aquí es inmodificable. En posesiones somos propietarios plenos o absolutos. Las posiciones pertenecen a las dispensaciones como la ley y la gracia, pero las posesiones pertenecen a la plenitud en vida; porque en plenitud todo está totalmente cumplido a fin de ser disfrutado. Romanos 10:4 el fin de la ley es Cristo. En posiciones hay mucha discusión y ambivalencia, a veces se cree y a veces se duda, pero en posesión solo reina la Fe Consumada.

Plenitud significa que no hay nada más que cumplir, ni hacer, ni esperar, sino disfrutar porque en esta cima máxima todos somos poseedores o propietarios de todas las riquezas del pleno entendimiento de Dios en Cristo.

Llegó tu hora, la hora de pasar de la posición a la posesión. No esperamos posiciones porque tenemos posesiones, sólo pueden reinar los poseedores o propietarios de las riquezas espirituales completas. A reinar en vida, paz, plenitud y libertad.

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